La bicicleta eléctrica vs Coche eléctrico: Cual es el mejor vehículo para moverse por la ciudad
La popularidad que rodea a los coches eléctricos está creciendo rápidamente en una sociedad que necesita “volverse verde”. Modelos como el Chevy Volt, Toyota Prius, y Nissan Leaf se vuelven más asequibles que sus predecesores a medida que avanza la tecnología de las baterías. Por supuesto, el precio sigue siendo astronómico comparado con los coches de gasolina en el mercado. Como persona que se desplaza a diario por la ciudad, ¿merece la pena pagar el precio de un coche eléctrico? ¿Existen otras formas de transporte que puedan ser más económicas o prácticas? Es difícil para el propietario de un coche dejar su automóvil por una forma de transporte distinta. Sin embargo, los beneficios de usar algo distinto como una bicicleta eléctrica como vehículo para los desplazamientos urbanos puede ayudarte a traer un cambio saludable a tu estilo de vida, así como cambiar a una forma de vida más “verde”.
Las bicicletas eléctricas son más asequibles
No hace falta decirlo, pero la bicicleta eléctrica media cuesta en torno a unos 2.000€. Comparada con el modesto precio del Prius (por encima de 20.000€), el nuevo Bmw i3 que lleva una bicicleta eléctrica incorporada en el maletero o el glamuroso coche eléctrico Tesla (más de 50.000€), esto es solo una gota en el estanque del potencial eléctrico. Cierto, las bicicletas eléctricas no tienen la autonomía de los coches eléctricos, pero la mayoría de los desplazamientos urbanos suponen desplazamientos de 3 km al día hacia el trabajo, por lo que las bicicletas eléctricas con baterías de litio son más que suficiente para este propósito. El recambio de las baterías también debe ser incluido entre los factores que aumentan el coste de un vehículo eléctrico.
Para un coche eléctrico, ¡las baterías de Litio pueden costar desde 5.000€ hasta 12.000€! El tiempo estimado de vida de estas baterías es aproximadamente de cinco años, dependiendo del coche, por lo que estos costes se pueden añadir rápidamente para el usuario no previsor. Aunque las baterías para bicicletas eléctricas no tienen suficiente potencia como para mover un coche, las baterías de Litio solamente cuestan unos 350€ de media y proporcionan autonomía para unos 50 kilómetros aproximadamente con una simple carga. Convenientemente, la vida media de estas baterías está entre los dos(si ha tenido una mala vida) y los cinco años(aunque ya cumplido este margen del fabricante seguimos sin reemplazar una batería). Seguro que te ahorras más dinero teniendo que comprar gasolina.(eficiencia de las bicicletas eléctricas)
El poder del pedal: Las bicicletas eléctricas son una gran forma de hacer ejercicio
Cambiar de un coche tradicional a un coche eléctrico probablemente no cambie los hábitos diarios de una persona. Cambiar de un coche a una bicicleta eléctrica, por otro lado, puede hacer que una persona que no está acostumbrada a hacer ejercicio se ponga en forma con una pequeña dosis de ejercicio diario. Por supuesto, una bicicleta eléctrica no va a ser como correr en la cinta, pero pedalear un poco con el motor eléctrico puede estimular el ejercicio aeróbico durante 20 o 30 minutos al día. Esto es suficiente para aumentar la frecuencia cardíaca, acelerar el metabolismo, y darle a una persona algo de energía para comenzar el día. ¿Quién puede decir lo mismo de un coche? (A parte de los taxistas de las grandes cuidades…) Con la obesidad convirtiéndose en un problema crónico en el mundo, 30 minutos en una bicicleta eléctrica es una buena forma de mantenerse en forma. Usar bicicletas eléctricas para desplazarse a diario es otra gran forma de disfrutar del exterior sin tener que llegar al trabajo empapado en sudor. Si se quiere realizar un ejercicio físico mayor, basta con apagar la asistencia eléctrica y de esta forma la bicicleta funcionará como una bicicleta tradicional. Es difícil entender una vida sin automóvil, pero el coste de un coche eléctrico puede empujar a la gente a comenzar a ir al trabajo en bici en lugar de en coche. Quizás algún día en el futuro los coches eléctricos sean más prácticos. Por ahora, una bicicleta eléctrica es asequible, divertida y útil.
Las viviendas pequeñas no son un problema para las bicicletas eléctricas
En las grandes ciudades, con millones de personas acumuladas en un pequeño espacio, el coste del aparcamiento es muy elevado. Mantener cualquier tipo de coche en una ciudad, ya sea eléctrico o de gasolina, puede ser caro. Los permisos se requieren en casi todos los sitios, y el aparcamiento en la calle es prácticamente imposible. Por otro lado, una bicicleta eléctrica puede ser aparcada en cualquier estación de aparcamiento para bicicletas (con un buen candado). Muchos edificios tienen ahora en su interior aparcamientos para bicicletas, y hay incluso bicicletas eléctricas plegables que caben en los pequeños apartamentos de Manhattan. Todas estas utilidades de la bicicleta eléctrica casi incentivan a no conducir un coche nunca más.