Bicicleta eléctrica Ralf Kittmann HMK 561
El diseñador Alemán Ralf Kittmann, con base en Berlín, podría haber capturado la mezcla perfecta entre bici y moto con su HMK 561. La 561 no utiliza pedales, entonces directamente la clasifican como una motocicleta y demuestra que es el momento de crear una nueva categoría de transporte. Ralf ha creado un vehículo híbrido qué, aún no llevando pedales muchos la clasifican como una bicicleta eléctrica.
hmk 561 es un hibrido muy ligero con un nuevo concepto de energía y novedoso diseño. El cuadro de carbono de una sola pieza se ha diseñado específicamente para que pueda trenzarse, lo que permite una producción rápida, eficiente y rentable.
El material del cuadro no sólo cumple su función estática sino que cumple muchas otras tareas como la de transmitir la energía al conjunto y de ahí le viene el nombre de maravilla a esta creación.
Su estructura trenzada de fibra de carbono se utiliza como un conductor eléctrico y como un almacenamiento de energía para el control permanente del estado de la trama. Aunque ya vimos en anteriores Post que la fibra de vidrio es frágil en comparación con otros materiales(Ver artículo) las nuevas tecnologías de compuestos de fibra de carbono permiten optimizar el diseño en términos de estática y materiales.
La fibra de carbono es altamente conductor, de modo que el diseñador Ralf kittmann la utiliza como una red de distribución de energía en lugar de cables. El sistema controla las luces y los motores eléctricos situados entre las llantas.
El ahorro de peso reduce la potencia de energía requerida generando un constante ahorro de valiosos y necesarios recursos energéticos. Hasta ahora se tenia como mejor motor eléctrico a los motores centrales pero el nuevo sistema de tracción de la HMK 561 rompe con todo lo establecido, el sistema de transmisión situado entre las ruedas, consiste en dos motores eléctricos, que transmiten la fuerza por rozamiento girando en la dirección opuesta a las ruedas accionando ambas ruedas, traseras y delanteras, en lugar de los comunes engranajes y cadenas... parece descabellado, pero No! Aquí tienes un prototipo.
La fibra de carbono funciona también como un conducto para los motores eléctricos de la parte delantera y trasera, que transmiten energía obtenida a la llanta durante el frenado. Ya que cuando se produce energía de frenado esta se almacena(freno regenerativo). Una función de la estructura de carbono es ahorrar energía motriz.
Si ya alucinabamos con la posibilidad de instalar baterías de hidrógeno en nuestras bicis eléctricas, lo que ha conseguido Ralf Kittmann no tiene palabras. El entramado de la tela se compone de una pluralidad de fibras aisladas que se extienden paralelas entre sí. Actúan como un condensador. Esta memoria se carga por inducción durante los tiempos de espera en los semáforos o en los estacionamientos. La conductividad eléctrica de las fibras permite el suministro de los equipos de a bordo.
A través de una red de filamentos conductores de carbono la condición de la trama esta supervisada de forma permanente. El tiempo de mantenimiento, se puede así, determinar con precisión, se evitan posibles daños y la longevidad del vehículo esta asegurada.
El uso de un nuevo concepto de transmisión de los motores eléctricos y el uso de los últimos avances de compuestos de la tecnología se refleja en el estudio y mantiene, recta y decidida, la tendencia actual hacia una nueva conciencia ambiental.